Una mujer fue detenida por intentar introducir de contrabando un celular en el penal de varones de Pocollay. La mujer, Lizeth Satalaya Andía (28), visitaba a un interno cuando fue capturada por agentes del INPE (Instituto Nacional Penitenciario).
Los agentes encontraron el celular escondido en el sostén de Satalaya. No pudo explicar por qué llevaba el teléfono celular y fue arrestada por la policía.
El teléfono celular ahora está siendo investigado por la policía. Están tratando de determinar si se utilizó para cometer algún delito.
Esta no es la primera vez que alguien intenta introducir de contrabando un teléfono celular en una prisión. En los últimos años, ha habido varios casos de personas que intentan llevar teléfonos móviles a las prisiones para ayudar a los reclusos a comunicarse con el mundo exterior.
Los teléfonos celulares se pueden usar para coordinar actividades delictivas y también se pueden usar para amenazar a testigos y víctimas.
La policía está instando a las personas a reportar cualquier actividad sospechosa a las autoridades.
