
En una declaración que ha sorprendido a la opinión pública, el gobernador regional Luis Torres Robledo deslizó la posibilidad de postular nuevamente a la alcaldía provincial de Tacna si las obras de infraestructura en la región no logran concretarse. Esta afirmación contrasta con sus comentarios de semanas atrás, cuando descartó participar en próximas elecciones si ello implicaba abandonar su cargo seis meses antes, prefiriendo, en ese momento, dejar "encaminada la gestión" para la siguiente autoridad.
Durante un evento, Torres Robledo manifestó: "Ojalá tengamos suerte para el segundo tramo, es una chamba de ustedes también, pero no. No voy a hablar de estas cosas más, porque yo sé que la vamos a hacer. Y si no la vamos a hacer, no se puede hacer por cuestiones políticas, no me queda otra cosa que postular a la alcaldía la próxima vez". Acto seguido, en un intento por matizar sus palabras, añadió entre risas: "No estoy anunciando, estoy cochineando, hermano, cochineo, cochineo".
Justificación de las obras y servicios básicos
El gobernador también consultó a los presentes sobre su preferencia: "¿Qué prefieren?, ¿se haga en su tiempo o que yo lo haga solo?". Torres Robledo explicó la importancia de las vías que se están construyendo, indicando que se dejará "un carril sin asfalto" en una de ellas.
La razón detrás de esta medida, según el gobernador, es clara: "En su momento tiene que pasar la red de agua y desagüe por esta zona. Si no, ¿cómo le vamos a dar buenos servicios a todos nuestros amigos que están aquí en el cerro? No podríamos", culminó Torres, enfatizando el compromiso de su gestión con la provisión de servicios básicos para los ciudadanos.
Las declaraciones del gobernador Luis Torres han abierto el debate sobre sus verdaderas intenciones políticas y el futuro de las obras en la región.











